El último domingo nos llevamos un valioso triunfo que nos acerca un poco más al objetivo de revalidar el título (una vez más).
Se pueden decir un montón de cosas del partido en sí, pero me parece que no es ni el lugar ni el momento. Cada uno sabe lo que hizo y estará tranquilo o no con su proceder.
Lo cierto es que tuvimos un primer tiempo excelente, prácticamente sin fisuras, donde concretamos todas las situaciones de gol que erramos la semana anterior. El partido lo arrancamos bien desde el vestuario llegando temprano, estando muy metidos desde el comienzo y plasmando la superioridad en el marcador.
Sin embargo en el comienzo de la 2da parte nos encontramos con la esperada reacción rival.
Lo cierto es que a la remontada se le sumaron las inexplicables expulsiones de Pablo (roja) y Tuti (azul) haciendo que todo fuera mucho más difícil. Más aún con el gol a los pocos segundos de las exclusiones (5-4). Sin embargo demostramos una vez mas lo que somos como equipo. El sacrificio, el compañerismo, el dejar todo en cada pelota hicieron que no solo podamos aguantar los continuos embates sino que además llegamos a convertir en el arco de enfrente.
Con la diferencia de 2 goles aguantamos como pudimos. Tal vez tuvimos la fortuna que nos faltó la semana pasada, pero no tiene mucho sentido analizar el partido luego de las expulsiones. Recién sobre el final un nuevo gol Tano cerró el 6-5 definitivo.
Ahora tendremos que encarar el tramo final del Torneo sin Pablo, quien recién volverá para la última fecha. Sin embargo intentaremos sobreponernos a semejante injusticia y saldremos el próximo partido a defender la punta con el futbol y los huevos que nos caracterizan.
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