La impresora se quedó sin tinta (o casi)

La frase del encabezado fue dicha por el borracho de Lopez cuando se lo llamo el sabado ante su injustificada inasistencia

Un Macandme cansado, dormido, quizá un tanto pasado de copas, dio cuenta de Ovejas Negras en otra levantada que seguramente quedará para la historia del club. Pero el principal problema no pasó por ninguno de los puntos arriba mencionados. El celeste salió a jugar confiado, subestimando el partido, pensando que su rival había perdido por 14 ante Sao Caetano…un error enorme.
El ser campeón les da un plus de motivación a todo rival que nos enfrenta, y esta no sería la excepción. Ovejas Negras jugó concentrado, poniéndonos en aprietos a lo largo de todo el partido. También es cierto que desperdiciamos infinidades de chances de gol, pero en líneas generales la performance como equipo no fue para nada buena.
Los goles fueron muchísimos y me resulta imposible recordar uno a uno. Vamos con lo que recuerdo…
Empezamos perdiendo después de un contragolpe, pero A. Iñigo empató luego de un centro atrás definiendo con su característico bombazo junto a un palo.
La ventaja la puso J. Romero Lamas quien definió luego de una buena jugada en la que combinó con M. López. Igualmente el empate no tardó en llegar….pero el 9 celeste estuvo despierto en el saque desde la mitad y ubico la bocha junto a un palo mientras Ovejas aún festejaba la igualdad.
Una nueva distracción dejó las cosas empatadas y para colmo de males nos íbamos al descanso en desventaja luego de un gol de lo que comúnmente en el metegol se denominada “pavota”.
Los errores defensivos parecían una constante en la defensa de Mac y en la 2do mitad se continuaban sucediendo. Una nueva pelota perdida y luego de una excelente definición quedábamos 3 a 5 abajo.
Nos pusimos a 1 con un zurdazo del Chupa López al 1er palo, pero nuevamente la diferencia se iba a 2. Nos volvimos a poner a 1 con un gol de “pavota” -esta vez a favor- de Mariano pero no podía faltar el famoso gol de tiro libre y las cosas quedaban 7 a 5. Fueron 35 minutos para el olvido….pero faltaban 5.
Fue A. Mascheroni quien dejó las cosas a 1 y el Tuti iñigo quien con el empuje que le venía dando al equipo terminó decretando el empate.
Luego el TC atajado por G. Barletta, los 4 minutos de adición, el escupitajo mala leche de Agustín al piso, el gol de la victoria de M. Mariñas en el 2do minuto de descuento, el 2do TC en el travesaño y el final.
Mac sufrió muchísimo….pero es puntero